Un
total de 20.400 peregrinos, unos 1.100 más que el año pasado, han participado en
la última Javierada del 2017
La
Cruz Roja ha realizado una labor destacada realizando 446 asistencias a
los peregrinos, un aumento también notable respecto al año anterior en el que
realizaron 254. El mayor número de asistencias consistió en tratamiento de
ampollas, lavados de pies, masajes, atenciones médicas, y curas, entre otros.
¿Qué es una Javierada?
La
Javierada es la peregrinación que se realiza al Castillo de Javier (Navarra) en
honor a San Francisco de Javier, uno de los santos patrones del Reino de
Navarra. Es un término acuñado por el obispo Olaechea en sus homílias en 1941.
Hasta hace unos años, existía la Javierada masculina y la femenina. En la
actualidad se realizan dos convocatorias sin distinción de sexo, la primera en
la que salen de algunos pueblos del sur de Navarra hacia el castillo, que se
efectúa en el primer domingo entre el 4 y 12 de marzo, y la segunda el sábado
siguiente.
Caminando
juntos.
Una
multitudinaria misa en la explanada del Castillo de Javier fue el acto de
cierre el día de ayer a la segunda Javierada 2017, cuyo lema ha sido «Caminando
juntos».
La
misa, que comenzó a las 17 horas ante los peregrinos participantes y fue
presidida por el obispo auxiliar de Pamplona y Tudela, Mons. Juan Antonio
Aznárez, que en su homilía ha llamado a los asistentes a «imitar» a San
Francisco Javier y decirle a Dios «confío en ti».
«Verás,
entonces, cómo Él va transfigurando tu vida, es decir, la va transformando
en una enorme bendición, para ti, para la Iglesia y para los pobres», afirmó.
«Su amistad, su vida y su alegría» es «lo que nos faltaba para ser felices de
verdad».
El
obispo recalcó que «para Dios nada hay imposible» y exhortado a los peregrinos
a preguntarse qué les falta para que su vida sea una bendición para ellos
y quienes le rodean.
«Si
el Señor te llama a salir de tu zona de confort, de tu tierra y de tus
seguidores, no lo dudes un instante; vale la pena. Él hará de tu vida una
bendición como hizo con San Francisco Javier».
Fuente: InfoCatólica