«Dios ha permitido la tragedia de mi vida para que
hoy pueda ofrecer esperanza a los que viven lo mismo que yo»
Mireille
Twayigira tiene 25 años. Llegó a Malawi como refugiada y ahora es médico
gracias a la escuela jesuita donde se graduó como una de las mejores
estudiantes del país. La semana pasada visitó Madrid con Entreculturas.
Son
las 13:30 horas de un caluroso día de junio. Mireille Twayigira lleva desde las
diez de la mañana atendiendo a los medios en un inglés increíblemente fluido
para ser una joven de 25 años que lleva huyendo y viviendo en campos de
refugiados desde los 2. Sonríe como si no hubieran pasado casi cuatro horas en
las que, una y otra vez, ha rememorado el calvario que ha sido su vida.