El
problema del hambre no es de población ni de producción, sino, sobre todo, de
logística y redistribución
Bastaría
con redestribuir
eficazmente un 25% de la la comida que se tira en el mundo para
salvar a los 795millones de personas que corren peligro
de muerte por desnutrición, e incluso para cubrir las necesidades de los
más de 870 millones que padecen hambre, según un informe de la
Organización para la Agricultura y la Alimentación de Naciones Unidas
(FAO).
El
último informe de Naciones Unidas sobre el desperdicio de alimentos lo
relaciona con la ineficacia de los sistemas de distribución y consumición en el
primer y tercer mundo. Los países industrializados tiran anualmente 670 millones
de toneladas de comida.
Pero
los países en vías de desarrollo también tiran comida: 630 millones de
toneladas al año. Aunque hay que tener en cuenta que en estos países vive mucha
más población mundial.
Un residente de un país rico puede tirar entre 95 y
115 kilos de comida al año. En
el África subsahariana y en el sureste de Asia, esa cantidad es solo de entre 6
y 11 kilos.
Estados
Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda son los países más negligentes a la
hora de desperdiciar comida. Entre todos ellos tiran el 39 por ciento de la
comida que compran, seguidos deEuropa, que arroja al vertedero el 31 por ciento de
los alimentos adquiridos.
Las estimaciones indican que la producción alimentaria
en 2050 deberá ser un 60 por ciento mayor que la de 2005 para cubrir las
necesidades de los 9.600 millones de personas que vivirán en el planeta para
ese año, y la complejidad de los sistemas de distribución de alimentos, en
lugar de aliviar el problema, solo han conseguido que se manifieste de formas
tan variadas como difíciles de combatir.
Fuente: Agencias/ReL