Efigenia, Benito de Palermo y Josephina Bakhita,
una gran inspiración contra el racismo
Wilfredor-CC0 | Paul R. Burley-CC BY-SA 4.0
Apropósito
de los acontecimientos de racismo que se han visto evidenciados en los últimos
días, no solo en EEUU sino en muchas de nuestras realidades locales, vale la
pena resaltar la inspiración que representan para nosotros algunos santos que
vivieron en carne propia esa lucha por sus derechos y su valor en un mundo,
tantas veces injusto e inhumano.
Incluir a santos de raza
negra tuvo como objeto, en la Iglesia, subrayar el alcance
universal de la santidad a través de personas llegadas de todos los horizontes.
Además, alentar la reflexión
en cuanto al lugar ocupado por ellos en la historia, aclarando así las
ambigüedades nacidas para justificar la esclavitud.
Unos de los primeros
indicios de valoración, apunta a finales del siglo XVI, con la
aparición de un Rey Mago negro en la iconografía o
con la presencia de Efigenia, una princesa etíope bautizada por el
apóstol y evangelista Mateo, en el catálogo de los santos.
El Martyrologium
Romanum, publicado en 1586, introduce varios santos más: Baltasar,
el rey mago; Felipe (eunuco etíope) bautizado por el apóstol Felipe, de
quien hereda el nombre; Moisés, bandido arrepentido del siglo IV y luego
ermitaño; Elesban, príncipe africano del siglo VI, protector
de cristianos y san Benito de Palermo, franciscano del siglo XVI.
Luego,
con los años, se les siguió dando espacio al reconocer, hasta la actualidad, la
vida ejemplar de muchos otros, como la de san
Martín de Porres y
de santa Bakhita.
Aquí
tienes algunas inspiradoras pinceladas de la vida de tres de ellos: