Envío que ocurrió en el Monasterio de Santa Paula, de la Comunidad de Jerónimas |
Él no es sacerdote ni religioso, ella tampoco optó por los hábitos, pero ambos, siendo esposos, son misioneros.
Se trata del matrimonio de los españoles
Miguel Rus y Paloma de la Fuente que el pasado martes 19 de agosto partieron de
Sevilla para llevar la alegría del Evangelio a los habitantes de Moyobamba en
Perú, y colaborar allí con el Padre Diego Román, quien también es de la
Archidiócesis de Sevilla.
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Esta no es la primera vez que los matrimonios se unen a la labor misionera.
El pasado marzo varias parejas, también españolas, realizaron misión en los
Seminarios Arquidiocesanos "Redemtoris Mater" y "San Jerónimo" de la
Arquidiócesis de Arequipa, en Perú. Estas parejas, junto con 414 familias,
fueron enviadas como misioneras a varias partes del mundo por el Santo Padre
Francisco el pasado 1º de febrero en un encuentro que sostuvo con el Camino
Neocatecumenal.
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De ahí se deriva la necesidad de prestar especial atención
al contexto cultural en el que, vosotros, familias, vais a operar: Se trata de
un entorno que es a menudo muy diferente del que provenís. A muchos de vosotros
os costará trabajo aprender la lengua local, que a veces será difícil, y este
esfuerzo es encomiable.
Mucho más importante será vuestro esfuerzo para
‘aprender' las culturas que encontrareis, sabiendo reconocer la necesidad del
Evangelio que está presente en todas partes, pero también esa acción que el
Espíritu Santo ha llevado a cabo en la vida y la historia de cada pueblo".
Fuente. es.gaudiumpress.org,