Los
obispos de la República Democrática del Congo han advertido que el bloqueo
político y las tensiones entre la mayoría y la oposición pueden conducir al
país al “caos” y al “desorden incontrolable”
La
inestabilidad política se agravó desde que el Presidente Joseph Kabila se negó
a dejar el poder en diciembre de 2016, pese a que su tiempo de mandato ya había
terminado y se debía convocar a elecciones.
En muchas partes del país se
realizaron violentas manifestaciones pidiendo que el mandatario dejara el
cargo.
La
Conferencia Episcopal Nacional de la República Democrática del Congo (CENCO)
logró fomentar el diálogo entre la oposición dirigida por Etienne Tshisekedi,
cofundador de la Unión para la Democracia y el Progreso Social (UDPS); y la
llamada Mayoría Presidencial, como se denomina la coalición gobernante, que
quiere que Kabila se mantenga en el poder por más tiempo.
El
31 de diciembre se logró un acuerdo entre ambas partes, conocido como “el acuerdo
de San Silvestre”. Este indica que habrá una transición durante el año más que
se quedará Kabila en el poder. Se nombrará un primer ministro designado por la
oposición, y se repartirán los ministerios entre la mayoría y la oposición.
También se fijaría la fecha para las elecciones presidenciales.
Sin
embargo, la muerte de Tshisekedi, ocurrida el 1 de febrero,
ha perjudicado las negociaciones porque él era el candidato más apropiado para
ser el Primer Ministro del gobierno de transición.
Según
informó la agencia vaticana Fides, actualmente el diálogo está detenido por las
modalidades de designación del Primer Ministro y por la repartición de los
ministerios. Tampoco se ha fijado fecha para las próximas elecciones
presidenciales.
En comunicado enviado a Fides, los obispos
piden a las fuerzas políticas “un diálogo abierto, basado en la buena fe y la
confianza mutua”.
Indicaron
que es inaceptable que haya “amenazas y violencia recurrente, resultado de la
manipulación, dirigida contra la Iglesia católica
por razones que no han sido reveladas”.
“Los
desacuerdos dentro de la clase política, y las tensiones en el país, pueden
conducir a la nación al caos”, señalaron y dijeron que la violencia generada
por la situación de inestabilidad “es una verdadera tragedia”.
“¿No
es mucha casualidad que esto suceda en el período previo a las elecciones?
Tememos una organización que retrase o impida la celebración de las
elecciones”, manifestaron los prelados.
Para
poder superar esta crisis, la CENCO ha pedido a los partidos políticos que se
en involucren y que hagan valer el acuerdo de San Silvestre. También
solicitaron al Presidente y a las fuerzas del orden para que garanticen la
seguridad en la población. Todo ello con el objetivo de evitar caer en la
incitación con discursos de odio.
Además,
se dirigieron a la Comunidad Internacional para que acompañe a la República
Democrática del Congo en esta etapa de transición.
En una Audiencia General celebrada en diciembre de 2016, el
Papa Francisco hizo un llamado a la paz y al diálogo en el país africano.
En
esa ocasión el Santo Padre se dirigió a “aquellos que tienen la responsabilidad
política de escuchar la voz de su conciencia, a ser conscientes del cruel
sufrimiento de sus compatriotas y a trabajar por el bien común”.
Por María Ximena Rondón
Fuente:
ACI