Alegres, entusiastas, con ganas de trabajar, así se describen ellos
mismos. Son los seminaristas del Seminario Mayor Santo Tomás de Aquino de
Nairobi, Kenia.
Y también tienen claro cuál será su futuro: hacer presente a
Cristo. Algo que ya hacen hoy como parte de su formación. Por eso, visitan
hospitales y rezan con los enfermos y moribundos.
La
Obra Pontificia de San Pedro Apóstol, con su campaña de Vocaciones Nativas,
ayuda a que estos 112 seminaristas de Nairobi lleguen a ser sacerdotes. Con los
56.100 euros enviados este año, cada uno de los seminaristas ha recibido unos
500 euros para su formación y sostenimiento. Esto equivale más o menos a 1,30
euros diarios, 40 euros al mes. Es lo que la generosidad de los fieles con la
campaña de Vocaciones Nativas ha hecho posible. Y es que son muchos los
seminarios y seminaristas a ayudar por toda África, que, tras sus puertas,
acogen al futuro de la Iglesia en este continente.
Además
hay que reparar las instalaciones. Este Seminario de Santo Tomás de Aquino abrió
sus puertas en 1963. Cincuenta años después, no se podían retrasar más las obras
que se han ido afrontando de manera progresiva desde el 2011. Este año, por
ejemplo, tocaban una parte de los techos y, para ello, se han enviado 15.000
euros.
Estos
cincuenta años del seminario, incluso sobre el papel, han dado mucho fruto: más
de 1.000 sacerdotes que actualmente ejercen su ministerio en Kenia y en otros
países, entre ellos tres arzobispos y dieciocho obispos. Tanto, por sólo por
1,30 euros al día.
Fuente: OMPRESS-KENYA