Guía para la
Cuaresma: Reflexiones para las lecturas de la liturgia eucarística de los
domingos de Cuaresma
“La Cuaresma de este Año Jubilar de la
Misericordia, pues, es para todos un tiempo favorable para salir por fin de
nuestra alienación existencial gracias a la escucha de la Palabra y a las obras
de misericordia”.
Se puede decir que éste es el centro del Mensaje del Papa
para la Cuaresma. Porque sólo dejándonos guiar por la Palabra de Dios y
poniéndola en práctica, podemos experimentar de tal manera la misericordia de
Dios que seamos misericordiosos también nosotros los unos con los otros.
El P. Romeo Ballán, misionero comboniano, ha
elaborado unas reflexiones para las lecturas de la liturgia eucarística de
los domingos de Cuaresma. Este tiempo es un tiempo muy rico en las lecturas
que la liturgia ofrece para la celebración de la misa, especialmente la de los
domingos. Éstas van guiando el itinerario hacia la Pascua, ayudándonos a
comprender un poco mejor el misterio del amor de Cristo en su misterio pascual.
Los comentarios están hechos desde la perspectiva de la misión y por eso
ayudan a profundizar en la intencionalidad del Papa en esta Cuaresma del Año de
la misericordia: reforzar la experiencia de la misericordia para que sea el
centro de la misión de la Iglesia.
El itinerario de los seis domingos de Cuaresma es para
recordar al vivo “el kerygma apostólico, en el cual la misericordia divina
ocupa un lugar central y fundamental. Es «la belleza del amor salvífico de Dios
manifestado en Jesucristo muerto y resucitado» (EG 36)”. La Cuaresma es
“un tiempo favorable para la conversión”, para hacer una experiencia más
profunda de la misericordia de Dios, para que el amor incondicional de Cristo,
el Esposo, enternezca “el corazón endurecido de su Esposa”, la Iglesia y ésta a
su vez lo ofrezca al mundo.
Itinerario de Cuaresma
El itinerario comienza con superar las tentaciones rastreras (primer
domingo) para elevar nuestra vida en la confianza en Dios y transfigurar en su
amor nuestra existencia (segundo domingo) para estar así en actitud permanente
de conversión (tercer domingo) y celebrar en la casa del Padre la fiesta
constante de la misericordia (cuarto domingo) para acoger a nuestros hermanos y
ser misericordiosos con ellos (quinto domingo) y finalmente entrar gozosos en
Jerusalén (domingo de Ramos) para vivir el misterio pascual de la muerte y
resurrección del Señor.
Este itinerario de Cuaresma con las reflexiones para las liturgias de los
domingos de Cuaresma ciclo C:
Fuente: OMP