Una vez cerrado el ejercicio
económico y presentadas las cuentas ante Roma, Obras Misionales Pontificias
(OMP) ha presentado esta mañana la Memoria de actividades 2018, que da cuenta
de todo lo realizado por la institución en España
El director nacional de OMP en Mali ha agradecido las ayudas recibidas
por parte de los españoles y ha explicado que las ayudas llegan, e impulsan el
trabajo de la Iglesia diocesana y de los misioneros, especialmente con los
niños. Él mismo encontró la vocación sacerdotal en un grupo de Infancia
Misionera liderado por un misionero español.
Los
donativos del Domund ayudan a las Iglesias más jóvenes. Entre ellas, la de
Mali, con un 3% de cristianos, que en 2018 recibió 699.000 euros en 2018, de
los cuales 60.000 euros salieron del bolsillo de los españoles.
“En
un país como Mali, 100% territorio de misión, la ayuda de OMP es muy
importante”, ha explicado Hervé Tienou, director nacional de OMP en el país
africano. “Con esta ayuda sentimos el apoyo solidario de toda la Iglesia
universal; y lo agradecemos, en estos momentos complicados de nuestra
historia”.
Según ha explicado, por un lado las OMP allí fomentan el
espíritu misionero en todos los fieles, y realizan colectas para colaborar con
las misiones en el mundo –unos 20.000 euros de media los últimos años-. Pero
por otro lado, también gestionan las ayudas que reciben de todo el mundo.
“Nosotros damos poco, lo que podemos, pero recibimos mucho”. Las diócesis hacen
sus peticiones ante los secretariados de OMP mundial, desde donde se aprueban
los proyectos que van a ser apoyados.
El
dinero llega a la cuenta de OMP en Mali y llega a su destino, donde se apoyan
proyectos pastorales y de apoyo de la infancia. En 2018, por ejemplo, España ha
ayudado a construir un comedor en un internado de chicas, para evitar que sean
explotadas al ir a la ciudad a estudiar. También se ha apoyado a grupos de
Infancia Misionera. “Yo mismo encontré el deseo de ser sacerdote, en los amigos de Kizito –uno de
los grupos de los apoyados anualmente por OMP-, y gracias al trabajo de Jesús
Martínez, un padre blanco español”, ha explicado. “Es muy emocionante saber que
España ayuda a hacer este trabajo en Mali, estamos muy agradecidos”.
El trabajo en la retaguardia
Mali
es un ejemplo de otros muchos países en los cinco continentes, que cada año
cuentan con el respaldo de OMP. Las ayudas son fruto de todo un trabajo de
sensibilización y formación que se realiza en toda España, de la mano de las
diócesis. En 2018, más de 240.000 personas asistieron a algún acto misionero, y
cerca de 3.300 participaron en algún curso de formación. Todo ello en el marco
de las tres jornadas que organiza OMP: Domund, Infancia Misionera y Vocaciones
Nativas.
“OMP
es una institución que merece ser conocida, porque hace mucho bien a la Iglesia
española y a todo el mundo”, ha explicado José María Calderón, director
nacional de la institución en España. Calderón ha desgranado los datos de la
Memoria, donde se explica todo lo realizado en el ámbito de la sensibilización,
la formación, el acompañamiento a los misioneros y las ayudas económicas
enviadas a las misiones.
Según ha explicado, el objetivo de las OMP es doble: de
sensibilización y de apoyo a las misiones, y para lograrlo, se trabaja a lo
largo de todo el año en las diócesis españolas. “El Papa subraya que la misión
debe ser el paradigma de toda la pastoral ordinaria, y ese es nuestro trabajo,
recordar que todos los bautizados somos enviados a la misión”.
“Los
11.000 misioneros españoles nos enseñan el camino a seguir en la Dirección
Nacional de OMP” ha afirmado Dora Rivas, responsable del acompañamiento de los
misioneros. “Los que trabajamos en la retaguardia tenemos que aprender un
lenguaje nuevo para llegar a nuestra sociedad actual, donde ningún concepto
religioso puede darse ya por supuesto”.
Según ha explicado, desde OMP se está haciendo un enorme
esfuerzo en el ámbito de la comunicación, para dar a conocer el trabajo de los
misioneros, y también para mantener el contacto personal con ellos. “Es
importante que la sociedad entienda nuestro mensaje, porque todos somos
necesarios para seguir ayudando a los misioneros y misioneras”.
Fuente: Obras Misionales
Pontificias