"La situación en toda la banda del Sahel, sigue,
lo mismo: ataques terroristas, bandidismo, secuestros de funcionarios y
problemática de refugiados internos"
Este chiste de Burkina Faso sobre el coronavirus lo refiere el
misionero Manuel Gallego, un Padre Blanco que escribe desde Bobo Dioulasso
contando la situación que se vive en el país.
En su comunicación dirigida a familiares y amigos, Manuel cuenta su
vuelta a Burkina Faso, el 28 de agosto, después de haber pasado ocho meses en
España retenido por la pandemia.
“Lo
primero que se me ocurre deciros, quizás, porque acabo de volver de España, es
que si aquí no hay mucho coronavirus es porque Dios no quiere, pues ahora, es
el tiempo de las lluvias y cuando ves la suciedad que hay en las calles y las
aguas estancadas… sí, hay mucha lluvia este año y la mayor parte de las
capitales de África del Oeste están teniendo graves inundaciones (Niamey,
Dakar, Bamako, Uagadugú, Abijan…) y desgraciadamente, ¡bastantes victimas que
lamentar!
Volviendo al coronavirus, gracias a Dios, no hay mucho por el
momento; las cifras oficiales para Burkina a 8 de septiembre de 2020 dan, desde
el 9 de marzo de 2020, 1.486 casos confirmados, de los cuales 509 son mujeres y
977 hombres; los curados, 1.123 y los muertos 56. Hay que decir que las medidas
de confinamiento han sido muy estrictas desde marzo hasta el 11 de mayo;
también había toque de queda, desde las 21 horas hasta las 5 de la mañana.
Actualmente
la gente ha vuelto a la normalidad pero las medidas de prevención continúan:
llevar la mascarilla en los actos públicos, en la iglesia o en la mezquita, no
darse la mano, guardar la distancia, lavarse las manos frecuentemente… y aquí
hay un chiste que corre por las redes sociales: ‘Nos dicen de lavarnos las
manos frecuentemente pero después no vemos la comida’ (ya sabéis que en África
se come con la mano derecha y antes de cada comida nos lavamos las manos).
Como en todo el mundo, la pandemia afecta a toda la economía
africana y muchas familias lo están pasando muy mal y ahora llega el tiempo de
volver a la escuela y hay que pagar matrículas, material escolar… aprovecho
para dar las gracias al Proyecto Huetos-Karangasso y otras personas que de
nuevo este año me estáis ayudando para continuar las becas a niños y jóvenes
necesitados.
A nivel de
nuestra comunidad de Misioneros de África, sigo con Emmanuel Adeboa de Ghana,
Victor Lijaji de Tanzania, Toby Ndiukwu de Nigeria y actualmente hay unos diez
jóvenes con nosotros que pronto volverán a sus comunidades o al Noviciado que
comienza a finales de septiembre.
En la parroquia, los dos domingos que llevo me han permitido de
saludar a la mayoría de los fieles; las tres misas dominicales siempre llenas
(a pesar de la lluvia y el mal tiempo) y también he tenido la alegría de ver
que durante mi ausencia, la pequeña gruta de la Virgen María la han renovado y
la han hecho mucho más grande para la fiesta de las mujeres, el 15 de agosto.
Mañana
comenzamos el Encuentro Pastoral Diocesano y durante cinco días, más de 300
personas con el arzobispo (sacerdotes, religiosos-as y laicos) vemos la
realidad de nuestras parroquias a través de los cuatro objetivos estratégicos:
la comunión, la liturgia, el testimonio y el servicio; el tema del año será
como el año pasado, Lucas 5, 4, ‘Id más lejos, y echar las redes’.
Creo que
habéis oído hablar del golpe de estado en Mali, actualmente hay una junta
militar que debe nombrar un presidente y dirigir una transición de 18 meses…
por lo demás, la situación en toda la banda del Sahel, sigue, lo mismo: ataques
terroristas, bandidismo, secuestros de funcionarios y problemática de
refugiados internos.
Las carreteras fronterizas con Mali estaban cerradas, pero
actualmente todos los puestos de fronteras están abiertos, pero a causa del
coronavirus solo pueden circular los camiones con productos de primera
necesidad y los coches particulares; los transportes públicos de viajeros entre
los diferentes países de África de Oeste siguen cerrados pero los aviones
vuelan entre las diferentes capitales africanas. Os dejo por el momento, que Dios
os bendiga y un fuerte abrazo a todos”.
Fuente: OMPRESS-BURKINA
FASO