La muerte de Teresita, la niña que cumplió antes de morir su sueño de ser misionera, ha dado la vuelta al mundo y su bello testimonio no se ha quedado únicamente en Madrid
Teresita recibió oficialmente de la Iglesia su nombramiento como misionera el 11 de febrero, fiesta de la Virgen de Lourdes |
Miles de misioneros, sacerdotes y religiosos, se formaron con las
lecciones, predicaciones, retiros, cursos, cartas, infinidad de
libros y dirección espiritual, pero sobre todo con el testimonio de la larga
vida sacerdotal y misionera del que fuera fundador y director del Centro
Internacional de Animación misionera de Roma.
Esta es la carta íntegra de monseñor Esquerda:
"Para Eduardo y Teresa, padres de Teresita:
Les envío un breve saludo, queriendo compartir sus sentimientos y
comunicarles los míos.
Estos días recibí la noticia de la “partida” de Teresita para
ser “misionera” desde el cielo (como Santa Teresita de Lisieux).
Como todos los misioneros, me he sentido tocado en el corazón.
A mí me ha correspondido, durante más de medio siglo, ser servidor de los
misioneros, en su formación antes de marchar y también acompañándoles en sus
misiones.
Ahora, con las palabras de Teresita, comprendo mejor toda la
teología, la vivencia y la acción misionera: “Yo quiero mucho a
Jesús”, “yo quiero ser misionera”, “yo rezo para que muchos niños conozcan a
Jesús”, “esa cruz pónmela en la barra para que la vea bien… Ya soy misionera”.
En estas palabras está todo lo que explicamos sobre la misión, la vocación
misionera, la espiritualidad y la acción misionera.
A nosotros ahora nos toca “callar” un poco más y fiarse de Jesús que
sigue llamando, acompañando y enviando a quienes él quiere y como él quiere,
para salvar a todos. Creo que nos convendría a todos recordar cómo nació
nuestra vocación y dejarse sorprender por el amor de Jesús, siempre nacido de
María. Y también dejar un poco de lado nuestro modo de hablar sobre la misión,
para dejarse sorprender por Jesús que sigue llamando y enviando.
Perdonen el tiempo que les he quitado. Sigan contentos,
acompañando a su hija misionera, ahora YA en el corazón de Dios Amor y
desde allí más misionera que nunca.
Una bendición, en Cristo y María, Juan Esquerda Bifet (Director emérito
del Centro Internacional de Animación Misionera, Roma)".
Fuente: ReL