Otra experiencia muy bonita que estoy teniendo y que culminará el próximo fin de semana, es ayudar a un grupo a organizar e impartir un retiro que se llama “Entretiempo”
Saludos desde Buenos Aires.
Hace mucho que no escribo otro capítulo de crónicas argentinas. Eso indica que tengo más trabajo y ocupación aquí y ya no me da tiempo para pensar tan a menudo en mis amigos españoles. Como hoy es un día en el que Argentina se paraliza (partido de mundial, que aquí es sagrado…), y como ya nuestra selección de fútbol no nos va a causar sobresaltos… pues hoy toca escribir. Lo voy a hacer sin mucho orden, según me salgan los recuerdos de los últimos meses.
En primer lugar, aquí estamos iniciado el invierno. Ya hace frío, algunas noches ha helado, pero aún poco; al estar cerca del mar no baja muchísimo la temperatura pero la humedad hace que se sienta más.
He visto paisajes muy bonitos de bosques de robles perdiendo las hojas, con tonos variados. Hace un par de semanas fui a celebrar una misa para un grupo de chicas del colegio que tenían la convivencia Mamá-hija; era en un “barrio cerrado” (algo así con una urbanización) que están en una zona muy boscosa; llovía a ratos y el bosque era muy bonito.
En el colegio Oakhill, donde soy capellán, celebramos el Corpus el miércoles 18 con una procesión por el patio. Todos los chicos y chicas participaron con fervor. Me tocó (por ser el nuevo) llevar el Santísimo en procesión (para ver las fotos, mi perfil de Facebook) y pasar por entre todos los chicos dando la bendición. Delante de mí iban 6 chicos de secundaria llevando una gran cruz de madera, que habían llevado ellos a las misiones de Semana Santa.
En Semana Santa estuve con un grupo grande de familias en misiones, en pueblo llamado Jáuregui, cerca de Luján, donde está el mayor santuario mariano de Argentina. Y también fueron 100 chicos y chicas de secundaria. Fue impresionante ver a toda esta juventud y las familias visitando las casas, organizando los oficios, animando a la gente del lugar a venir a la Iglesia (no sólo al edificio, sino a la familia cristiana que somos todos). De ahí han surgido varios grupos misioneros estables, de chicos y chicas, que tienen sus ratos de adoración y de formación cada mes.
También hicimos misiones con los chicos y chicas del Colegio Mano Amiga en la misma zona del colegio (que es bastante pobre), y fueron un grandísimo éxito. No puede acompañarles yo, fue el P. Adán López con ellos. Eran 30 chicos del colegio, y se les agregaron otros 20 de la zona y de la parroquia, con lo cual han formado ya ahí un grupo misionero estable. El Párroco está encantado con ellos.
Otra experiencia muy bonita que estoy teniendo y que culminará el próximo fin de semana, es ayudar a un grupo a organizar e impartir un retiro que se llama “Entretiempo”. Es un retiro para hombres de entre 40 y 50 años, para repensar su vida en lo que podría ser (analogía con un partido de fútbol) el segundo tiempo de su vida, la segunda mitad. Las charlas del retiro las dan ellos, los laicos; yo como sacerdote doy dos charlas y asesoro, pero ellos llevan todo, hacen todo. Estoy muy impresionado de lo bien que lo hacen, del amor y el entusiasmo que ponen. En esto se ve que la Iglesia está muy viva y que no son solo los curas y las monjas los que hacen y predican. Este jueves pasado y ayer viernes hicimos el “ensayo” del retiro: nos juntamos los 13 del equipo y entre nosotros nos dimos las charlas y las comentamos con crítica constructiva para mejorar todo lo posible; fue un maratón tremendo, pero muy muy bonito. Ayer cuando yo llegué a casa a mitad de tarde me fui a dormir una buena siesta porque estaba reventado.
Estoy participando y animando varios grupos de oración: dos de hombres y 5 de mujeres (¿será que las mujeres rezan más, porque también lo necesitan más?), y es muy enriquecedor compartir con estos grupos la reflexión sobre el evangelio y sobre la propia vida vista desde Dios.
En el colegio Oakhill también soy el capellán de las chicas de secundaria. Se ha formado, sobre todo a raíz de las misiones de semana santa, muy buen ambiente. Sobre todo hay un grupo que todos los días van a la capilla a tocar la guitarra y así animar y ambientar la comunión. Suelen ir más de 70 chicos y chicas de secundaria a comulgar todos los días en el recreo.
Hace 15 días sufrimos un duro golpe como comunidad en el colegio, pues murió en accidente de avión un papá. Nos conmovió mucho a todos. El funeral fue muy duro: acompañar a su mujer y sus hijos y tratar de arroparles todo lo posible con el cariño y apoyo de todos.
En el colegio Mano Amiga hemos tenido varias alegrías:
- los niños y niñas que han hecho su primera comunión en el colegio Highlands de Sevilla (y sus familias) nos han hecho un gran donativo: 1.400 euros para las becas de chicos de 3° (sus colegas de primera comunión). MUCHÍSIMAS GRACIAS A ESTOS NIÑOS Y A SUS FAMILIAS. Con su ayuda podemos seguir estudiando y ayudando a muchas familias.
- la empresa Sangsung ha donado al colegio equipos informáticos y material para armar un taller de reparación de computadoras usadas (la secundaria del colegio tiene especialidad en informática, como buena salida laboral para su alumnos)
- otra empresa ha donado muebles de oficina, que servirán para mejorar las instalaciones.
- más importante que lo anterior: hicimos una jornada de retiro para los docentes del colegio, y otra para mamás de los alumnos.
- y más importante aún, es el grupo misionero de alumnos que se ha formado. MANO AMIGA MISIONERA.
¿Qué más contaros?
Hace un mes fui a Salta, una ciudad a 1.300 kms de Buenos Aires (dos horas de avión), acompañando una peregrinación, pues ahí supuestamente se aparece la Virgen María. No voy a dar yo un juicio sobre si se aparece no, eso le corresponde al obispo y lo está estudiando. Pero sí hay un ambiente muy bueno de oración, de presencia de Dios y de la Virgen. Disfruté mucho porque también puede conocer la comunidad de legionarios que vive en esa ciudad y el colegio que atienden.
Bueno, se me acabó la inspiración por hoy.
Espero no tardar tanto para mi próxima “crónica argentina”
Para todos, un fuerte abrazo y mis oraciones.
P. Jesús Pérez G., L.C.
Capellán Colegio Oakhill Pilar
