Gracias a todos los misioneros presentes por enseñarnos con sus obras que el más insignificante acto de amor puede abrazar a la humanidad herida
La
cantante Luz Casal ha pronunciado el pregón del Domund, en la
catedral de Santiago de Compostela, en un acto presidido por el arzobispo de la
diócesis, monseñor Julián Barrio.
Con un pregón escrito como si de una
canción se tratara, la cantante ha destacado el trabajo de los misioneros,
quienes más allá de su propio interés, van a los lugares más difíciles; y allí,
con pequeños gestos, llenan el mundo de belleza. Luz Casal ha reiterado la
necesidad de volver a retomar los conceptos cristianos de caridad y
misericordia.
Luz
Casal recuerda cómo de niña le hablaron del Domund en el colegio. Las hermanas
Doroteas pusieron un documental, y les explicaron el significado de la caridad
y la misericordia. "Esa lección fomentó en aquel grupo de niñas nuestra
futura disposición a echar una mano al necesitado". Este año, ella misma
se ha convertido en la pregonera del Domund.
Con este pregón -que este año
alcanza su sexta edición- y con "El Domund al descubierto"
-iniciativa en la que se enmarca-, OMP quiere seguir la estela del Papa, y
abrir decididamente todas sus actividades a la sociedad. Una Iglesia de
puertas abiertas y en diálogo con todos, como hacen los misioneros.
Luz
Casal ha constatado en su pregón -escrito con formato de una canción, con
estribillo y estrofas-, que en la actualidad esos conceptos que le enseñaron de
niña han perdido su significado, y los hombres y mujeres vivimos anestesiados
ante el dolor del hombre. La cantante gallega ha hecho un llamamiento a dedicar
a los necesitados "unos minutos, como esos que algunos dedicamos a
nuestros abdominales y glúteos; u ofrecer un donativo que no supondrá un gasto
mayor que el de comprar un botecito de crema antiarrugas o una hidratante de
manos".
Posteriormente,
Luz Casal ha dedicado gran parte de su pregón a valorar el trabajo de los
misioneros, que muestran que su entrega va más allá de la solidaridad. "Sin
patrias ni banderas, abandonan su proyecto de vida propia, su propio interés.
Héroes anónimos, que en sus viajes al infierno acaban por alcanzar el cielo al
juntar con ternura sus manos a otras manos".
La
pregonera de este año ha valorado el ejemplo de los 13.000 misioneros
españoles, que cruzan el planeta para llevar esperanza y dignidad donde no las
hay. "En estos casi cien años de celebración del Domund la labor de los
misioneros está rodeada de silencio, y aun así no falta la alegría en su
misión". Luz Casal ha urgido a España a volver a recordar su historia,
como país que abrió las puertas a la evangelización, y a no dar la espalda al
trabajo espiritual. "Tenemos confianza en la ciencia, en la razón, en la
cultura, en el poder que da el progreso desde el siglo XVIII, pero esto no debiera
impedirnos creer en la misericordia que llega a través de la fe".
La
cantante ha recordado a todas las personas e instituciones que ha conocido en
su trayectoria profesional, a todos aquellos que intentan frenar el mal del
mundo, entre ellas, las OMP. "Para que triunfe el mal, lo único necesario
es que las personas buenas no hagan nada por evitarlo", y ha recordado que
ante los problemas, o se espera a que alguien los solucione, o se pone uno en
marcha para solucionarlos. "Esta última opción es la que habéis elegido
los misioneros, religiosos y seglares". Por último, ha recordado que al
colaborar con las buenas causas, uno se siente bien. "Por eso yo creo que
la colaboración solidaria debería estar siempre de moda".
Este
pregón se enmarca dentro de "El Domund, al descubierto", una
iniciativa organizada por Obras Misionales Pontificias (OMP) España, para dar a
conocer la misión universal de la Iglesia a la sociedad civil. Con el pregón,
se anticipa la semana grande del Día Mundial de las Misiones -más conocido como
Domund-, jornada que se celebrará el próximo domingo 22 de octubre en todo
el mundo.
Fuente: OMP