La devolución del edificio y la reapertura de la parroquia eran un sueño antiguo de la diócesis de Tete
Fue el mismo día de Navidad cuando el administrador
apostólico de la diócesis mozambiqueña de Tete, el misionero de la Consolata,
Sandro Faedi, inauguraba la Parroquia de São Paulo, en la misma ciudad de Tete.
Con una gran afluencia de fieles para celebrar la
Navidad, se leyó el decreto por el que se reabría al culto esta iglesia y
parroquia tras 43 años de cierre, según informan los Misioneros de la
Consolata.
En 1975, tras lograr Mozambique su independencia, el
régimen marxista que llegó al poder destruyó o nacionalizó los lugares de
culto, destinándolos a otros usos, confiscó escuelas y hospitales de la Iglesia
y expulsó a los misioneros.
El decreto leído en la parroquia decía: “Considerando
que el día 25 de noviembre de 1973, el Excmo. Señor Don Augusto César Ferreira
da Silva, obispo de Tete, creaba la Parroquia de São Paulo de Tete, con sede en
la Iglesia de São Paulo, localizada al lado del Cuartel Militar; y que por
vicisitudes históricas la Iglesia de São Paulo fue nacionalizada el 13 de junio
de 1975 y, en consecuencia, suspendidos los servicios pastorales y
parroquiales; y como la parroquia nunca fue suprimida por ningún decreto episcopal,
tomo la iniciativa de reabrirla”.
La devolución del edificio y la reapertura de la
parroquia eran un sueño antiguo de la diócesis de Tete. En 2017, tras varias
gestiones, el Ministerio de Defensa entregó el edificio a la diócesis. Se
comenzó entonces, con la colaboración de la comunidad cristiana, la labor de
rehabilitación de un edificio que estaba en pésimo estado, tras años de
abandono.
Se arregló el tejado, se repararon las paredes, se colocaron
cristales en las ventanas, se pintó y se decoró interiormente, haciendo que el
edificio volviera a su belleza original.
Junto a las labores de recuperación material, también
se desarrolló una labor de sensibilización de los católicos del barrio donde
está la parroquia, Chingale, que hasta ahora se desplazaban a la parroquia de
la Catedral de Tete, para que se movilizaran para dar vida e impulso pastoral a
la parroquia. La respuesta fue muy alentadora.
Ahora, el cuidado pastoral de la misma está a cargo de
los Misioneros de la Consolata. Además de la zona urbana, en el corazón de la
ciudad, están a cargo de una zona de la periferia, en el barrio de Mpadue, y
otra rural de primera evangelización, a 20 kilómetros, con varias aldeas como
Matambo, Wiriamu, o Chawola.
En cuanto a la ciudad de Tete, con la apertura de São
Paulo, vuelve a tener tres parroquias, como hace 40 años.
Fuente:
OMPRESS-MOZAMBIQUE